
Teníamos reunión el lunes y nuestra compañera Maribel Chica (tutora de Constelaciones III) nos trajo el Otoño. Si, justo en esta semana en la que en Sevilla recién se empieza a notar este equinoccio, ella se presentó con un gran regalo: los frutos del huerto de “La Beli”, su madre.
¡Qué bonito! Qué maravilla recibir los dones de la tierra, de la naturaleza y de la mano amorosa de quien la cuida.
En estos tiempo en los que parece que nunca dejamos de labrar, sembrar y trabajar, los membrillos, caquis y granadas de La Beli nos invitan a recrearnos en la belleza de este momento y a mirar la abundancia y lo cosechado.
Y algo de lo que nos podemos sentir orgullosos en nuestra Aula es de un equipo humano y profesional que entrega lo mejor y que, como Maribel, nos llevan a contactar con la gratitud y lo esencial. 💖


